Cerveza
Historia de la cerveza
La
cerveza es un líquido de malta dulce o fermentada saborizada con lúpulo,
fabricada de forma natural. Sus principales ingredientes son cebada, lúpulo,
levadura y agua, y el agua con que se la prepara debe ser pura, estéril y
potable. Contiene también cebada, que debe ser germinada, secada y
tostada, el lúpulo, que le da aroma amargo, y la levadura, que
permite su fermentación. Acompaña muy bien las comidas por su sabor amargo y
contenido carbónico, y tiene además propiedades medicinales: es antioxidante
y protege las células de su degradación.
El amor
por la bebida es tal, que todos los 2 de agosto se celebra su
existencia: el Día Internacional de la Cerveza. La moción surgió
entre amigos en una mesa de un pequeño bar de Santa Cruz, en California,
allá por el 2007, y tuvo tantos adeptos que el festejo se hizo masivo por todo
el mundo, incluyendo 207 ciudades, 50 países y 6 continentes. ¡La cifra y el
amor por la bebida seguirá subiendo!
Eureka
Su origen
de la cerveza data de 4 mil a.C, en la zona de la Mesopotamia del Oriente
Medio, hace más de siete mil años. La evidencia más antigua es una
tablilla en la que se observan varias personas tomando cerveza de un mismo
recipiente. Los Babilonios heredaron de ellos las tareas del cultivo de la
tierra y la elaboración de cerveza en una tabla de arcilla, la cual explica su
fórmula de elaboración.
Su descubrimiento fue accidental: se mezcló agua con cereales y sucedió
el milagro. Como resultado los sumerios humedecían el pan con agua y la
levadura fermentaba la mezcla que la convertía en bebida alcohólica. Se
producía un ritual en el que la gente se unía. La historia de la cerveza es
también la de la agricultura: los asentamientos se forjaban alrededor de
los cultivos. Lo relevante es que era un alimento ya que tenía una fuente de
azúcar difícil de conseguir.
Su deidad de la cerveza era la Diosa Ninkasi.
La bebida del pueblo
En Egipto la denominaron “zythum” y era esencial en la
dieta cotidiana. Mientras que el vino era para las clases altas, la
cerveza era para el pueblo. En época de los faraones, sus fábricas
producían hasta 4 millones de litros por año, tanto, que los graneros
estaban prácticamente destinados a la cebada para su elaboración y la
utilizaban como moneda de cambio. Los egipcios fueron los primeros en
mercantilizar la cerveza.
Como buenos comerciantes, dado que el precio este cereal era elevado,
utilizaban una variedad del trigo: la espelta. Además descubrieron la malta,
le agregaron azafrán, miel, jengibre y comino para darle sabor y color.
¿Cómo se prepara la cerveza?
Sus cuatro ingredientes principales son: agua, cebada, levadura y
lúpulo. Se puede utilizar cualquiera de estos cereales para fabricarla: cebada,
trigo, maíz, centeno o arroz. Se le añade lúpulo, hierbas, frutas o
chocolate. El primer paso de producción es el malteado del grano de
cebada que se mezcla con agua para que germine y se descompongan los
almidones para que aparezcan los azúcares. Se calienta el grano para frenar su
germinado. El secado de la malta produce sabores y colores que formarán parte
del producto final. Dependiendo del tipo de secado se producirán diferentes
tipos de sabores.
Se muele la malta y se mezcla con agua caliente para su maceración
durante una hora, tiempo en el que se desprenden sus azúcares. Para el
resultado final influye el tipo de agua utilizada, que debe ser pura. Se
procesa el líquido macerado y se lo cuece con lúpulo, que actúa como
conservante natural y le da el sabor característico. El tipo de lúpulo
incide en el sabor y aroma, además de mejorar la espuma, lo cual influye en su
estética. Se añade levadura, organismo vivo, que consume el azúcar y lo
convierte en alcohol. Al pasar la cerveza por una doble fermentación esto le da
sus características burbujas.
Todas las cervezas son fabricadas de la misma manera, la diferencia
de sabor, textura y color reside en el cereal utilizado. Con distintos
tipos de levadura se consigue un sabor y aroma distinto. El proceso puede
durar días o meses y los cambios de clima y temperatura influyen en el
resultado final.
Glosario
Malta:Cebada germinada, desecada y tostada levemente que se emplea en la
elaboración de cerveza y para hacer infusiones.
Lupulo:Planta herbácea trepadora de tallo áspero, largo y nudoso, hojas
perennes y acorazonadas, formadas por hasta siete lóbulos, flores pequeñas, con
sexos separados y fruto seco, parecido a una piña.
Forjar:Trabajar un metal y darle una forma definida cuando está caliente por
medio de golpes o por presión.
Sumerios:Relativo a Sumeria, antigua región del sudoeste de Asia, o a sus
habitantes.
Espelta: La espelta, también conocida como escaña mayor o escanda
mayor, es una especie de cereal del género Triticum. Es una planta hexaploide,
al tener seis juegos de 7 cromosomas. Es un cereal adaptado a climas duros,
húmedos y fríos.
Degradación:Es un término con origen en el latín degradatĭo. El concepto está
asociado al verbo degradar, que se refiere a quitar a una persona sus títulos,
distinciones y prerrogativas, o a minimizar las facultades o propiedades de un
sujeto o de algo.
Asentamientos:Colocación o establecimiento de una cosa en un lugar de manera que quede
firme.
Carbonico:Que procede de la combinación del dióxido de carbono con el agua y no
existe en estado puro.
Antioxidantes:Sustancia que impide la formación de óxidos.
Cebada:Planta cereal forrajera, muy parecida al trigo, de espigas prolongadas,
flexibles, algo arqueadas y semilla alargada y puntiaguda
Receta:
Pollo a la cerveza
·
Muslos de Pollo - 5 unidades
·
Cebolla - 1 grande
·
Zanahorias - 1 unidad
·
Cerveza - 1 vaso
·
Tomillo - 1 rama pequeña
·
Sal - al gusto
·
Pimienta negra - al gusto
·
Aceite de oliva
Empezaremos por pelar y cortar la cebolla en juliana y la zanahoria en
tiras finas.
A
continuación, salpimentamos los muslos de pollo y los pasamos por un poco de
harina. Añadimos un poco de aceite a una cazuela y ponemos a calentar a fuego
medio.
Añadimos
los muslos, y procuramos sellarlos bien por ambos lados, de esta forma nos
quedarán jugosos por dentro. Retiramos para terminar de hacerlos después.
Ahora
añadimos a la cazuela las verduras y pasados unos 10 minutos cuando estén
pochadas o la cebolla esté transparente añadimos los muslos
Vertemos
el vaso de cerveza y una pizca de tomillo, y dejamos cocinar 40 minutos a fuego
medio hasta que se evapore y la salsa quede espesa. ¡Listo! toca disfrutar de
nuestro pollo a la cerveza…
Comentarios
Publicar un comentario